Martes, 5 de Agosto del 2025

Circo sin Pan

Circo sin Pan

Que habitamos un tiempo de bombardeo y sobrestimulacion visual no es novedad. El tiempo actual nos propone anestesiar nuestra identidad colectiva o peor, que nuestra identidad se reconstruya copiando un espejo negro que sólo devuelve crueldad y deterioro. Ese es nuestro tiempo y es lo que nos toca transformar. Pero para transformarlo debemos primero asumir los errores cometidos, enfrentarlos y proponer nuevos horizontes.

Creo en la educación como camino, pero en una educación que logre dejar atrás sus viejos harapos y se reconfigure bajo un modelo superador, que incentive la empatía y construya conocimiento bajo el lema de una sociedad más equitativa, cálida y solidaria.

Esta actualidad de viejas y rancias políticas se maquilla con mejores diseños pero sigue siendo más de lo mismo. Nos demuestra, día a día, que cada conquista de derechos se desvanece en el aire y todo lo que creíamos ganado se diluye sin mayores conflictos. Arrebatan derechos y expulsan trabajadores/as mientras nos distraen con Adornis payasescos, desfinancian la cultura mientras destruyen el poder adquisitivo, visitan genocidas a la par que divulgan fotos de victimas del machismo. Pisan banderas, rompen lazos sociales y alimentan lo peor de nuestra condición humana. Nos entretienen con el show mientras gozan del business.

Resulta imprescindible crear propuestas disruptivas, que enamoren al conjunto social y les devuelvan la alegría. Repensemos los vínculos, limemos asperezas pero iniciemos en nuestros hogares, en los barrios, en cada institución una patria real, con sus sanas diferencias pero donde cada quien pueda desarrollarse porque tiene sus necesidades básicas resueltas. Debemos salir y dar testimonio del tiempo que habitamos, hacernos cargo y reclamar lo que nos pertenece. Una vida justa. Alguien dijo en una oportunidad “no tememos a las ruinas porque llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones” es hora de salir a construirlo.